Lo Femenino despierta, se despliega,
atravesando densas
capas de ocultación, desvalorización, y encierro.
Lo Femenino vibra y se siente a si mismo.
Se Re-conoce y sólo mediante este reconocimiento
puede
volver a la vida y acompañar a la Tierra en su florecimiento.
Por más sutiles e inconscientes que sean los intentos de
apagar tu Luz,
están ahí, agazapados, y aparecen, a veces vestidos de amable
paternalismo.
Sin embargo, cuando vuelves a ti misma,
algo susurra desde
dentro, y te recuerda que eres una semilla luminosa
que está restaurando un
desequilibrio universal.
Cuando estés a solas, recuerda quién eres.
Cuando estés en compañía,
recuerda expresarte, desde lo más
profundo del magnetismo del Alma,
que vive en ti, simplemente por eso, porque
eres mujer.
Fuente: Alana