Darle la bienvenida a lo femenino es reconocer y aceptar su
dolor y su rabia, y el papel que hemos desempeñado en su profanación. Las
mujeres también han actuado en connivencia con lo masculino, han negado su
propio poder y magia naturales y, en su lugar, han aceptado valores y formas de
pensar masculinos. Han traicionado a su propio yo más profundo. Sin embargo,
hemos de tener cuidado de no quedar atrapados en esta oscuridad, en las
dinámicas del abuso, en la rabia y la traición.
Las mujeres se identifican fácilmente con el sufrimiento de
lo femenino y con el trato que recibe de lo masculino, y proyectan su propio
dolor y rabia en los hombres. Entonces quedamos todavía más enredados en la red
que nos niega cualquier transformación. Si nos identificamos con el dolor de lo
femenino, nos convertimos fácilmente en agentes de su rabia, en lugar de llegar
a lo más profundo del misterio del sufrimiento, a la luz siempre oculta en la
oscuridad. Ya que, en las profundidades de lo femenino, se encuentra el
conocimiento profundo de que el abuso también forma parte del ciclo de la
creación. La Gran Madre encarna una totalidad que contiene incluso la negación
de Sí misma, y necesitamos Su totalidad, si es que queremos sobrevivir y
renacer.
La transformación verdadera, como cualquier nacimiento,
requiere de la oscuridad tanto como de la luz. Sabemos que se ha abusado de lo
femenino y que se sigue abusando, así como se continúa contaminando el planeta.
Pero la mujer que ha experimentado el dolor de un parto, que sabe que la sangre
forma parte de él, está iniciada en la oscuridad; conoce los ciclos de la
creación de un modo oculto para lo masculino. Es necesario que la mujer se
entregue y entregue su sabiduría al proceso actual de muerte y renacimiento, y
honre así el dolor que ha sufrido. Descubrirá entonces que su magia y poder
habrán renacido de una nueva forma, que se los habrán devuelto de una manera en
la que ya no podrán ser contaminados por lo masculino y su afán de poder.
-Llewellyn Vaughan-Lee.-
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ResponderEliminar..y es que dejar que aflore nuestra Diosa dormida, rescata a la Raza entera, pondera en el hombre su capacidad de ternura, le recuerda su su luz y en este juego donde prevalece el recuerdo, la mujer empodera su cáliz bendito para recrear la nueva vida, para que todos sanemos , para que el AMOR SEA!!! :)
ResponderEliminarQue el Amor SEA!!!!
ResponderEliminarY no olvidar que en todas las facetas aquello que es lo masculino y aquello que es lo femenino se deben unir para crear la vida. En equilibrio...
Que la Fuerza de la Diosa descienda a nuestras manos y seamos capaces de poner su luz en el mundo a través de nuestras acciones concretas...